
Las nuevas metodologías de trabajo en el entorno digital
La digitalización del entorno empresarial es un hecho, una realidad que aumenta cada día y que engloba todos los sectores del mercado. La revolución tecnológica, la era del dato, Internet y la rapidez del cambio, ha generado formas de trabajar distintas. Adaptadas a un nuevo entorno competitivo, donde el emprendedor es capaz de encontrar nuevos productos, servicios y distintas maneras de comercializarlos, más eficientes. Así, gracias una nueva metodología de trabajo, han encontrado un hueco sabiéndose adaptar a mucha velocidad. Descubre algunas de las nuevas formas de trabajar.
Design Thinking
Hasta hace pocos años, el concepto de innovación, se asociaba con empresas muy potentes y con inversiones enormes. Pero en este nuevo entorno digital, pequeños proyectos empresariales o startups innovan, lo que les coloca en una posición ideal para competir con los grandes de igual a igual, e incluso, cambiar las normas de un mercado anquilosado. La metodología de Design Thinking, es muy adecuada para este momento de transformación donde la evolución es una de sus principales características y está muy relacionada con la innovación. Es clave por cuanto cuestiona modelos anteriores, los desmenuza y los reconstruye, siempre poniendo al usuario en el centro. Consiguiendo de esta forma modelos relacionales inesperados que aportan soluciones creativas a problemas complejos.
El Design Thinking es un método destinado a analizar algo, usando herramientas o componente relacionados con el diseño y la creatividad. Es una búsqueda de soluciones desde la descomposición del problema en partes más pequeñas sobre las que se construyen ideas sin limitaciones. Se desarrolló en los años 70 en EEUU y está muy en alza en el presente. Nació en el ámbito del desarrollo de productos, pero hoy en día está muy relacionada con el concepto de innovación, la mejora de procesos, los nuevos modelos de negocio o la experiencia del usuario. Se compone de 5 fases:
- Empatizar: se trata de comprender a la perfección las necesidades (por ejemplos del mercado, o de los usuarios a quien nos dirigimos). Observar, escuchar, comprender y asimilar para conseguir las claves sobre las que actuar.
- Definir: quedarse con lo que aporta valor, de todo lo recogido. Identificar problemas críticos.
- Idear: la creatividad empieza a jugar para generar múltiples soluciones, en una suerte de expansión del pensamiento. Se trata de llegar más allá de la evidencia y de la lógica para interconectar distintas ideas.
- Prototipar: se trata de poder poner en marcha las ideas desarrolladas. Plasmar en algo tangible lo ideado.
- Testar: se trata de probar los modelos, prototipos, soluciones, etc… con el único objetivo de entender si son o no válidos, así como mejorarlos gracias al feedback.
Lean Startup
La metodología de Lean Startup aborda el lanzamiento de productos o servicios basado en un proceso de innovación continua. En el paradigma empresarial anterior, el proceso de desarrollo de un producto, servicio o modelo de negocio seguía unos pasos muy definidos. Que estructuraba el desarrollo en fases continuas, dependientes unas de otras. Lo que consigue ajustar mucho los procesos, pero trabajar a meses vista, eliminando la capacidad de adaptarse a cambios y, por lo tanto, con dificultad para reaccionar.
El mercado digital, precisamente, destaca por su alta volatilidad y predisposición al cambio. Por este motivo los procesos tradicionales no sirven. Cada vez hay más competencia, más canales de distribución y distintas formas y momentos para el consumo. La metodología de trabajo Lean Startup, nace con la vocación de poder escuchar al consumidor durante todo el proceso (de una forma integral) y generar espacios para el cambio en cualquier momento, fomentando la innovación continua. Se apoya en 2 pilares:
- Producto mínimo viable (PMV): se trata de conseguir algo atractivo y útil para el cliente potencial, de la forma más rápida, eficiente y optimizada. No es algo sin acabar, sino una versión válida, que conjugue eficiencia y rapidez y que de forma real haya sido probada y testada. En concepto es el de aprender a base de generar hipótesis.
- Pivotar y perseverar: es la base de esta metodología, donde la creación, medición y aprendizaje se unen para alimentar el proyecto de forma continuada. Y ayudan en la decisión de pivotar (variar algunas de las partes) o perseverar (continuar con la misma idea).
Metodologías Agile
Estas metodologías están pensadas para competir en un mercado que se mueve a mucha velocidad y que cambia constantemente. Es una forma de trabajar, en la que destaca la capacidad de desarrollar proyectos de una forma ágil. A principios de este siglo, los CEOs de las empresas más dominantes crearon el Manifiesto Agile, que reunía una serie de nuevas metodologías de trabajo, rápidas y flexibles. Para poder adaptarse a las nuevas necesidades de eficiencia y velocidad del nuevo mercado digital. Las 2 más conocidas son:
- Scrum: su objetivo es el de reducir al máximo el riesgo, gracias al trabajo colaborativo. Desaparecen las jerarquías a cambio de los “roles”, en una suerte de relación laboral horizontal entre iguales. Se asignan tareas independientes, que todas ellas componen el resultado final en la unión de los resultados. Hay alguna figura que destaca, la del product owner, que es la unión entre cliente y proyecto, o la de scrum master, que es el vínculo que une a todas las partes. Propone un trabajo por ciclos y la conversación diaria (15 minutos) para explicar posibles dificultades y mantener el proyecto cohesionado
- Kanban: una metodología de trabajo basada en el “flujo” continuo, con la finalidad de resolver los cuellos de botella que todo proceso puede generar. Se gestiona con un sistema de tarjetas para poder visualizar el flujo de trabajo, como las tareas prioritarias, las tareas activas, las tareas pendientes o las que están en cola.
Metodologías combinadas
El entorno digital evoluciona y el encaje exacto con una sola metodología es muy difícil. El futuro (y el presente en muchos sectores), se orienta a combinarlas, consiguiendo extraer el mayor beneficio de cada una de ellas. La sinergia entre metodologías, ha dado lugar, incluso a una metodología tipo:
- Lean Design UX thinking: como su nombre indica combina los conceptos de Lean Startup y Design Thinking, creando un flujo determinado:
- Fase 1: entender al usuario y sus necesidades para generar ideas.
- Fase 2: desarrollar las ideas, bocetos, estructuras…
- Fase 3: involucrar al cliente en el proceso.
- Fase 4: validar estas ideas de forma empírica, para disponer del mínimo viable.
- Fase 5: proceso de desarrollo y mejora de ciclos.